Éste ha sido uno de esos fines de semana que te planteas quedarte en el sitio que visitas... que, en este caso, es mi casa, Extremadura. Hace exactamente una semana redescubrí algo en el blog "La Memoria del pan"... la Ecotahona del Ambroz. Leí el relato de Ibán y enlacé la web de los chicos de la Ecotahona.
Resultó que estos chicos hacían pan de forma tradicional, sin más flautas que harina, agua y sal y que para colmo bajaban al mercadillo de Plasencia los martes. Llamé a mi madre y mi suegra para que se acercaran a ver el puesto y comprarles unos panes... no les desagradó, pero lamentablemente están demasiado acostumbrados a un pan más triste y con mejorantes... no supieron apreciarlo como a mí me hubiera gustado.
El martes me aventuré a contactar con Fernando (el panadero aventurero que fundó la cooperativa) y tras un par de mails cruzados, el sábado a las 7 a.m. estábamos en Aldeanueva del Camino de conversa con Fernando en su tahona. No entro en detalles porque Ibán hizo una estupenda narración .
Fue muy agradable la hora y pico que le vimos formar panes para la segunda fermentación. Nos contó lo complicadillo de montar el negocio, de cómo llegó allí, de la situación de la alimentación (crianza de pollos y otros animales, vegetales...), de su implicación en creación de sociedades de consumo... no sé, muchas cosas. Alucinamos cuando nos enteramos de que en Plasencia hay tres sociedades de consumo!!! A la que ellos sirven el pan. Nos quedamos preocupados al darnos cuenta de lo "desarraigados" que estábamos... y de lo poco que conocíamos nuestra ciudad.
La conversación nos llevó a los quesos y en concreto a los que fabrica Montserrat Sotoca, una catalana casada con extremeño, afincados en Casas del Monte (Valle del Ambroz; os recomiendo su piscina natural de aguas gélidas!!). Él cuida de las ovejas y cabras (300 cabezas en total) y con la leche ella elabora los quesos "El Chozo Extremeño". Al parecer llevan con esto unos 18 años, empezaron con la ovejas, pero en Extremadura... "la cabra tira al monte" y gusta mucho el queso de cabra, así es que... de ahí las 150 cabezas de las que cuidan. Tuvimos ocasión de hablar con ella largo y tendido en el mercadillo del sábado de Hervás mientras esperábamos a que llegaran los panes de la Ecotahona. Hervás, aunque empieza a ser un sitio turísticamente sobre-explotado a mi parecer, cuenta con un barrio judío precioso, con unas vistas del valle... maravillosas. El Pinajarro se ve desde cualquier lugar del pueblo y la ruta circular Heidi que parte desde Hervás... te deja unas estampas muy bellas de los alrededores. No tengo fotos porque nos dejamos la cámara en Madrid...
Fueron conversaciones muy muy interesantes!! Jo... para mí fue un golpe "bajo" ver cómo estas personas han visto una forma de vida en Extremadura... yo todavía estoy como aferrada a la tontería de que si has estudiado una cosa... tienes que ejercer de ello, aunque estés lejos de tu casa y tu familia.
Este fin de semana ha sido todo descubrimientos... el domingo asistimos a una de las "judiás" de las fiestas del "Pero Palo" en Villanueva de la Vera. Es su forma de celebrar el Carnaval. A modo resumen, "Pero Palo" fue un gañán para unos y un galán para otras... que fue ajusticiado por los novios y maridos de muchas mujeres. Es una fiesta que cuenta con muchos hitos a lo largo del año que se inicia el 1 de enero y que su momento álgido lo encuentra entre el sábado y el martes de Carnaval, cuando se ajusticia a Pero Palo.
Como digo... fin de semana de descubrimientos... casualmente en tierra desconocida para much@s, incluso para quienes somos de allí!
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