Seguimos con pintura holandesa del XVII, en pleno barroco.
Pues el tema de los bodegones ( así como los retratos, por ejemplo), fue muy desarrollado en ésta época precisamente en los Paises Bajos, debido a su particularidad religiosa (prohibición de representar temas religiosos en la iglesia protestante reformada holandesa) y socio-económica (gran prosperidad económica burguesa que busca decorar sus casas y , al mismo tiempo, legitimar su poder, a diferencia de Europa donde predominaba la aristocracia y la Iglesia).
Stilleven, "naturaleza tranquila", es el nombre con el que se independizó este género tan especializado dentro de la pintura holandesa, mientras que en las lenguas romances o el ruso preferían términos más relacionados con la "naturaleza muerta", donde se refiere a aquellos alimentos o flores recogidos o capturados, que no están vivos, pero que aún no se han deteriorado. La pintura detiene el tiempo, hace un poco de frigorífico eterno, retratando al alimento en su máximo explendor y manteniéndlo fresco, lozano y apetitoso indefinidamente (lo libra del deterioro y la muerte).
Como veis, ésto es como el "rasca y gana". En el momento en que se rasca un poco aparece la carga simbólica...
Floris Van Dijck, "Naturaleza muerta con quesos", 1613
Extraído de , dónde se puede ampliar.
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