Revivo este hilo (que lleva parado exactamente hace un año) para compartir algo bonito.
Un rinconcito de trabajo de una cocina sueca diseñada a finales de los 50. La madre del granjero ayudó a diseñarla, el mostrador tiene su altura ideal y toda la cocina está llena de cosas alucinantes. Yo me enamoré de un falso cajón que se convierte en superficie de trabajo. A pesar de los cientos y cientos de panes, masas y pasteles, está como el primer día.
El cajón superior se saca, descubriendo una gran bandeja sobre la que trabajar masas y dulces de manera ordenada, sin crear un desaguisado y encima pudiéndote ir con la música a otra parte sin molestar.
Me consta que hay algún carpintero por el foro, así que... ¡a tomar nota! Yo quiero eso en mi próxima cocina. Trabajar sin molestar ni manchar, con un buen tacto de madera. Me lo pido ya mismo para reyes