En primer lugar me gustaría enviar un saludo tanto a Ibán (mi guía)
como al resto de foreros, dado que soy nuevo por estos lares...
Mi caso es el siguiente: En cuanto mi osteópata (de cuyo nombre no quiero acordarme
), me invitó a abandonar el consumo de trigo, me lancé como desesperado en busca de soluciones. La primera no se hizo esperar; compré en la panadería de toda la vida de mi ciudad (Pontevedra) 2 Kg. de harina de centeno, 2 Kg. de harina de maíz y levadura y sin la más remota idea de como hacerlo me puse a amasar una pseudo-hogaza de pan de maíz y centeno que, sorprendentemente, se convirtió en algo parecido a pan que terminé por comerme (con la inestimable colaboración de mi mujer y mi hija mayor)
. Siguiendo las indicaciones de Ibán, comencé el proceso de creación de una masa madre que a día de hoy no es una masa madre, sino un formula uno como el de Alonso; a saber:
1er día -21:30 h- mezclo ingredientes.
2do día -21:30 h- remuevo ingredientes.
3er día -hoy a las 10:30 h- los ingredientes habían doblado su volumen.(refresco después de desechar la mitad)
A las 21:30 h de hoy parecía literalmente que estaba hirviendo. En este momento me está angustiando ir a la cocina, no vaya a ser...
Por consiguiente, y volviendo al título del tema, solicito de todo aquel que desee prestarme su ayuda, precisamente eso: ayuda en forma de recetas bajo esas premisas.
Un abrazo y gracias por anticipado.