Hagamos un poquito de trampa...
Este es el pan básico de MaMa que hicimos el Sábado en el taller de Ibán.
Después del amasado, estuvo un rato reposando encima de la mesa mientras estábamos de palique, después a una bolsa de plástico y a dormir debajo del asiento del coche mientras íbamos a cenar. A las 22:30 de la noche llegamos a casa, lo formé, al banettón y directo a la nevera hasta las 8 de la mañana del domingo, que lo saqué de la nevera para que atemperase mientras calentaba bien el horno. Tres cuartos de hora después a la cocotte en caliente y 1 hora y cuarto de horneado después salió este bellezón del horno:
Reposo cortito hasta las 14:30 que nos lo comimos con la paella del Domingo
Y aquí la miga:
Para mi gusto personal (que no para el del resto de la familia) estaba un poco ácido. Ibán me explicó al día siguiente que podía haber reducido la primera fermentación hasta hacerla casi inexistente, ya que esa fermentación es sólo para ganar en sabor, y esta hogaza ya lo llevaba con sus 200gr de masa madre potentorra. Para la próxima eso haré, a parte de usar la mama jovencita para evitar aún más esa acidez.
Y recomiendo encarecidamente a todo aquel que pueda asistir a los cursos de Ibán que lo haga, son espectaculares!
El del día siguiente, de focaccias, ciabattas, pan de centeno y brioche fue alucinante! Y me he quedado sin plaza para el de panes suecos
Pero como nos ha dicho que seguirá viniendo por Valencia, no pierdo la esperanza!