Jolín, Izaskun... qué coraje setapuesto...
La verdad es que afortunada o desafortunadamente, yo ya nací en medio de la abundancia de lo que denunciabas en cuanto a los huevos... No es que en mi casa se tire nada (menuda es mi madre...), pero bueno, que no era lo que contaba mi abuela de compartir un huevo frito con otros dos hermanos y ser una fiesta el día que había.
A mí me da penica cuando salen estudios, metaestudios y ortopédico-estudios, denunciando la farsa que es lo de los productos orgánicos. Especialmente cuando conoces a gente cercana que se ha metido de lleno en un proyecto así... o bueno, cuando tienes a los abuelos cavando para sembrar y recolectar y, como dice Jano, te zampas unos tomates en verano que te dejan pasmao... Me parece, como poco, vergonzoso. Me gustaría saber qué pasaría si se echaran pestes así de las grandes superficies...
Pero lo que decía antes... entiendo que mucha gente no los compre por la cosa del precio. Bueno, siempre se puede uno comprar lo que estás más económico y esperar a que la semana siguiente esté algo más barato... Nosotros tenemos la suerte de estar en una cooperativa que no se mueven con cestas, sino como un miniultramarinos donde haces tu pedido de la semana siguiente y a veces te encuentras que no hay cosas que querías, pero sí otras en su lugar... pues nada... a echarle imaginación a veces
. Pero vaya, no hemos cogido un grado de compromiso elevadísimo, muchas veces completamos algunas cosas (caprichos sobre todo) en el mercado de al lado de casa. Para mí lo bueno de que existan estas cosas es que puedes implicarte en el grado que quieras, si no existiera, directamente a comer huevos Nº 3.
Corto y cambio, perdón por el chapón.