- 1000 gr harina de trigo integral (RdS)
400 gr masa madre de centeno blanco
70% agua y un poco más durante el amasado
1,5% sal
1,5% malta de trigo
2% miel
Añado la sal, amaso unos segundos muy suavemente, hago varios plegados, formo una bola y la dejo reposar 15 minutos.
Repito la operación, en total 6 series de plegado y reposo durante 90 minutos. Cada una de las veces pulverizo agua sobre la encimera y me mojo las manos.
Divido la masa en dos, formo dos hogazas y las coloco en banetones enharinados con centeno.Los cubro con una bolsa de plástico y los meto en la nevera durante 12 horas.
Pasado ese tiempo los dejo a temperatura ambiente 2 horas y 15 minutos.
Greño y horneo con piedra y abundante vapor durante 15 minutos a 240ºC, los cambio de posición y horneo 45 minutos más sin vapor a 200ºC
Los dejo enfriar sobre una rejilla dentro del horno con la puerta abierta. Tienen un color dorado increíble y huelen de maravilla. La corteza quedó tostadita y crujiente; la miga, aunque poco alveolada, no se hace pesada, a pesar de que en una de las hogazas quedó un pelín pastosa. Me encanta el sabor... no sé cómo describirlo, como a campo.