Madre mía, Melianteas, tú sí que te explicas!

El pan está muy bien para ser de los primeros, greña incluida, y, aunque yo no la he usado, esa harina extra fuerte no debe ser fácil: creo que las harinas con tanta fuerza son buenas para recetas tipo brioche, etc., pero a veces para el pan son más complicadas.
De todos modos, calculando tus tiempos me parece que tu pan fermentó una barbaridad de horas, y para colmo después del segundo levado lo amasaste y fermentaste una vez más... puede que por eso no creciera nada en el horno.
Otra cosa... si la masa madre de centeno funcionó... ¿por qué empezaste una nueva?
Melianteas escribió:Cada día al refrescarla me daba cuenta que era muy líquida, y pegajosa
La masa madre es tan líquida como uno quiera, yo suelo usar el mismo peso en harina que de agua porque me resulta muy fácil para calcular las recetas, pero depende de lo que quieras conseguir. Tú ponías más agua que harina (110 agua/80 harina), y además harina blanca, así que es normal que quedara muy líquida. Además así es muy difícil apreciar cambios porque no retiene el gas y no se aprecian las burbujitas como, por ejemplo, en una masa más espesa de centeno. No creo que la de centeno fuera mejor, sólo que probablemente se notaría más cómo crece, etc. Puedes empezar con una de centeno y después blanquearla.
Melianteas escribió:en los videos se dice que el segundo día solamente se remueve ni se quita ni se añade. Pero en los pasos con las fotos (web: te quedas a cenar?) se indica que el segundo día si que se debe alimentar ¿...?
¿Como dejar la masa del pan ya preparada para meterla en el horno al día siguiente? He visto el comentario en varios hilos pero no acabo de entenderlo (para no ser una esclava del pan) ¿Como saber cuando la masa madre se ha sobrefermentado?
No hay que seguir unos tiempos exactos, porque depende de la temperatura, la harina usada etc., no te obsesiones con ello. Si sigues el método de te quedas a cenar seguro que consigues la MM, pero no tiene por qué funcionar exactamente como en las fotos, ten paciencia.
Para dejar la masa para el día siguiente ("retardar") se guarda la masa en la nevera, la temperatura disminuye la fermentación y así puedes prolongarla. Se puede hacer en varios momentos y depende de la receta, pero funciona muy bien si lo haces justo antes de empezar el segundo levado, cuando acabas de dar forma; lo pones en el banetón o similar, y hasta el día siguiente.
La sobrefermentación se aprende a ver con la práctica: según mi experiencia, en las masas líquidas se nota porque en vez de burbujas grandes en la superficie empieza a haber una especie de espuma; en las masa sólidas, porque deja de crecer e incluso se desinfla; y en las masas de pan... práctica!
En fin, de todo esto hay mucha información en el foro (retardar, aspecto de la masa madre, etc.), usa el buscador y seguro que encuentras más. Mucho ánimo y mucos panes!
