Ayer Lunes se vinieron a casa cuatro amigas mías para una pequeña iniciación al pan. Vamos, un cursito en toda regla. Técnicas de amasado clásico, Lepard, boleado, formado, horneado...
Un masita básica al 60% para que no se me asustaran, pero con un resultado más que aceptable.
Unos panecillos hipercrujientes y muy, muy sabrosos, a pesar de no llevar ni mama ni prefermento, pero sí su fermentación en condiciones, que a 32º que estaba mi cocina le costó casi dos horitas.
Aquí tenéis a mis chicas (falta una que se tuvo que ir antes del horneado) frente al botín enfriando en rejilla:
Y los panecillos resultantes que fueron devorados en tres casas diferentes para la cena con gran placer de los respectivos cónyuges
La experiencia fue fantástica, me lo pasé en grande y ellas también y disfruté compartiendo lo que sé de manera didáctica
Eso sí, asfixiadas de calor. Una de ellas embarazada de 8 meses, yo sufriendo que con los calores le diera un jamacuco
