Deyrdre escribió:Acabo de leer este libro (que por cierto compre a un precio muy tentativo en "The book depository"

) y tengo sensaciones un poco contradictorias al respecto. Al principio hay unos errores pequeñitos en las descripciones, por ejemplo en el articulo de Ucrania pone
Talena en vez de
Kalina como nombre de "baya local" o en la ilustración de trenzado de una challah (o hala en el "local"

) pone que es una "paska", siendo que la paska real es lo mas parecido a lo que aparece como "the wheat loaf" en el articulo de Rusia (al lado de matzah, cual no se que tiene que ver con los panes rusos)... Son detalles sin mucha importancia, pero merman un poco la veracidad de lo que cuenta sobre las costumbres locales.
Por otro lado, los panes si salen y bien que salen!

También las fotos son muy tentativas. Por eso, para mi, este libro lo veo como una inspiración cuando apetece hacer algo especial.
Saludos.
Sobre lo que comentas de algunas erratas (o pequeños fallos) terminológicas, es cierto que hay alguna cosilla. No demaisado extraña, por otro lado, ya que Dan Lepard no habla todos los idiomas de los países donde fue, así que muchas de las palabras son transcripciones fonéticas (de hecho "Talena" en inglés suena mucho como "kalina"; de hecho, esta creo que se ha colado en la primera edición española). Por ejemplo, la transcripción española del famoso pan judío es "jalá", cualquier cosa como "chala, khala, etc." son pequeños fallos. Vaya, es un libro que incluye muchas cosas, así que estos detalles si que son un desafío. No obstante, en la web de Lepard hay un hilo abierto en el foro donde, con el tiempo, se van solventando o "afinando" este tipo de pequeños fallos.
Es curosio lo que comentas de que es un libro "para cuando apetece algo especial"; lo tengo bastante fresco

y a mí me parece un libro casi "de catecismo panarra", lleno de "ética panarra" (si la podemos llamar así) y de contenidos básicos, desde técnica hasta ingredientes y, lo que es más importante, amor por el pan y las gentes que lo elaboran. Todo el libro respira respeto por los ingredientes locales, por lo que hay a tu alrededor, por una aproximación cotidiana y respetuosa al pan, como alimento, como elaboración o como producto cultural. El abanico de recetas, técnicas e ingredientes presentados me cuesta encontrarlo en muchos libros publicados. Una de las grandezas de este libro, en mi humilde opinión, es precisamente que "las mata callando", sin grandilocuencia, sin alharacas, te va dando una tras otra clases de técnica, de ingredientes, etc. Pero vaya, todas las opiniones son buenas
